TIBERIO FIORILLI: “SCARAMUCCIA” ( y JEAN-BAPTISTE POQUELÍN (MOLIÈRE), SU MEJOR ALUMNO)
DE LA HISTORIA DEL TEATRO
Para
estos días intensos, ciudad vertiginosa, nada
mejor que relajarnos, una lectura
liviana, si es posible de un texto corto y sin pretensiones, que a su vez nos
aporte algo. ¿Qué les parece?
Elegimos
escribir sobre un hombre de teatro que no todos lo tienen presente y que, sin embargo, tuvo mucha importancia en la Historia
de este arte: Tiberio Fiorilli:
Scaramuccia, nacido en Nápoles el 9 de noviembre de 1608, hijo de Silvio FiorIlli un gran intérprete del
personaje de de la Comedia dell arte “Pulicinella”, a su vez Tiberio
inmortalizó la máscara de “Scaramuccia”
un “zanni” (criado de clase baja o sirviente) atrevido, vestido íntegramente de
negro la peculiaridad era que el actor orientaba la farsa con ingenio. Este
personaje causó furor en Francia donde se lo llamaba “Scaramouche”.
El gran
comediógrafo, actor y director Jean-Baptiste Poquelín nacido en París en 1622
más conocido como Molière, en el año 1658, cuando llegaba de
una gira de provincias, alternaba sus espectáculos con los italianos en la sala
parisina Petit Bourbon. Cuando
actuaba la compañía de Fiorilli, en
las llamadas “jornadas extraordinarias”,
Molière descansaba pero entre el público de la sala. Los italianos
influyeron y mucho en la formación del galo. Los personajes de sus obras
estaban inspirados en los peninsulares de la "Comedia dell arte", para citar
algunos ejemplos: Pierrot, descendía
del carácter gracioso y elegante de Piero
y Pedrolino, y como éste último
vestido de blanco, sin antifaz, con la cara empolvada de harina, ingenuo,
dulce, un poco niño y atolondrado. Del mismo modo se puede relacionar a Gillotín con Giglio y Paillasse con Pagliaccio.
Moliére admiraba a”Scaramuccia”
y tomaba de éste verdaderas lecciones de mímica y no se perdía ninguna de las
representaciones del original italiano y lo tomaba como modelo.
Se sabe que el francés estudió con pasión el arte escénico de ésas compañías, comediantes natos que llevaban en la sangre el instinto de la "Comedia del Arte".
Lo que Carlo Goldoni admiraba en Molière no era más que el resultado de la
admiración que éste sentía por la forma vivaz de la interpretación italiana.
Ellos le revelaron que el actor sin la sabiduría de la pantomima y de la
improvisación, no pasa de ser un recitador.
Palaprat
escribió: “Este gran actor (Molière)
y poeta aun mil veces más grande, vive en tan estrecha familiaridad con los
italianos, porque todos ellos son actores verdaderos y gente muy honesta: hay
siempre dos o tres de ellos invitados a nuestra mesa”
Cuando Molière murió en 1673, los italianos
absorbieron a los actores de su Compañía.
Sin la fama de su “discípulo” francés el
nombre de Fiorilli, fuera de los
grabados que se conservan, no nos diría mucho, pero su aporte al teatro fue
grande.
Esta es una breve, muy breve reseña sobre Fiorilli
“Scaramuccia” y Poquelín (“Moliere”), su mejor alumno.
El genial napolitano falleció en París.
ALBERTO
DI NARDO
Excelente !!!
ResponderEliminarMuy bueno!!!!
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMe trajo al recuerdo una parte de la canción "Bohemian Rapsody" de Queen donde dice "Sacaramouche, sacaramouche, ..." y que habla de él. Muy buena nota!
ResponderEliminarQue valioso enriquecedor análisis Alberto!!
ResponderEliminarRecién descubro este blog, muy bueno!!!
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